Alabado sea Allah.
1. Allah describió a Sus “amigos cercanos” (awliyá') como aquellos que tienen dos características: la fe (imán), y la piedad o temor de Dios (taqwa). Allah dijo (traducción del significado):
“Por cierto que los creyentes sinceros no temerán ni se entristecerán [el Día del juicio]. Éstos creyeron y fueron piadosos” (Yunus 10:62 -63).
2. Los verdaderamente cercanos a Dios, no irían contra el Mensaje que Su Profeta trajo (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él). El Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) nos advirtió contra los inventos en la religión, porque Allah ha perfeccionado Su religión y completado Su favor sobre Sus servidores. Allah dijo (traducción del significado):
“Hoy os he perfeccionado vuestra religión, he completado Mi gracia sobre vosotros y he dispuesto que el Islam sea vuestra religión” (al-Má'idah 5:3).
El Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Quien invente algo en este, nuestro asunto (el Islam) le será rechazado”.
3. Por lo tanto, uno puede distinguir entre el íntimo de Allah (wali) y el íntimo de Shaitán, observando el carácter de la persona, su comportamiento y su compromiso religioso. ¿Reza regularmente en comunidad en la mezquita, por ejemplo? ¿Evita hacer uso ilegal de la propiedad ajena? ¿Evita ir en contra del Islam, agregando o suprimiendo algo en su práctica de la religión? Etc….
4. No es permisible para un musulmán innovar en ninguna oración que recuerde a Dios, para recitarla regularmente o enseñar a los demás que así lo hagan, tal como las colecciones de súplicas conocidas como wird o awrád, ma’zuurát o du’á. Las oraciones que fueron reportadas en la Tradición Profética auténtica son suficientes para esto, caso contrario el musulmán es un innovador o alguien que convoca a los demás a seguir inventos. El Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Quien invente algo en este, nuestro asunto (el Islam) le será rechazado”.
Ibn Ráyab al-Hánbali (que Allah tenga misericordia de él) dijo:
“Este hadiz representa uno de los principios más importantes de la religión musulmana. Es como una regla con la cual las apariencias y los actos visibles pueden medirse, tal como el hadiz “Las acciones valen según su intención” es la regla con la cual las motivaciones interiores detrás de las acciones pueden medirse. Tal como cada acto que no está realizado por la causa de Allah no traerá ninguna recompensa para quien lo realiza, así también cada acto que no está de acuerdo con la manera enseñada por Allah y Su Mensajero será rechazado y cargado sobre las espaldas de quien lo realice. Quien invente cosas nuevas en la religión y haga cosas para las cuales Allah y Su Mensajero no han concedido autorización ni permiso, no es parte de esta religión en absoluto”. (Yami’ al-‘Ulúm wal Hikám, 1/180).
An-Nawawi (que Allah tenga misericordia de él) dijo:
“Este hadiz es uno de los principios básicos más importantes del Islam, es uno de los dichos más concisos y cabales del Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él). Claramente afirma que las innovaciones y las invenciones en la religión serán rechazadas. El segundo reporte agrega otra idea, que es que algunos de quienes sigan innovaciones de otros pueden tomar una actitud terca cuando son confrontados con las evidencias del primer reporte, que dice “Quien invente algo…”. Ellos pueden decir, “Yo no estoy inventando nada”. Pero a quien diga esto se le puede confrontar con la evidencia del segundo reporte, que dice “Quien realice un acto que no esté de acuerdo…”. Esto claramente muestra que todas las innovaciones serán rechazadas, ya sea que quien la realice esté innovando o esté siguiendo las innovaciones de alguien más… Este hadiz debe ser aprendido y memorizado para denunciar las malas acciones y esparcirlo como evidencia para que todo musulmán pueda usarlo”.
5. El Shéij al-Islam Ibn Taimíyah (que Allah tenga misericordia de él) dijo:
“No hay duda de que las súplicas y las oraciones para recordar a Dios están entre los mejores actos de culto y el culto es uno de los asuntos en los que no hay espacio para las opiniones personales, sino que debemos seguir lo que el Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) hizo y enseñó, no nuestros deseos y antojos, ni innovaciones. Las súplicas y oraciones del Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) son lo mejor que uno pueda encontrar. Quien siga esto estará sano y seguro, y los beneficios y resultados positivos que obtendrá están más allá de toda descripción. Cualquier otra súplica u oración puede ser haram (prohibida) o makruh (detestable, desaconsejable); pueden involucrar creencias paganas aún cuando la mayoría de la gente no lo note, y los detalles de esto sería muy largos de explicar aquí.
Nadie tiene el derecho de enseñar a la gente ninguna clase de súplica u oración aparte de las que son mencionadas en la Tradición Profética auténtica, o convertirlas en una forma de acto de culto que se espera que la gente cumpla regularmente como si fuera obligatorio, tal como se realizan las cinco oraciones diarias.
Esto es una innovación en la religión para la cual Allah no ha concedido ningún permiso… Sobre adoptar una colección de súplicas (wird) o de oraciones para recitar regularmente que no estén prescriptas en la shari’ah, es algo que no está permitido. Las súplicas y oraciones prescriptas por la shari’ah son lo mejor que uno pudiera encontrar, y nadie las ignora abandonándolas por cosas inventadas, excepto los ignorantes, los negligentes y los malhechores”. (Maymu’ al-Fatáwa 22/510-511).
Shéij Muhámmed Salih al-Munáyyid