la santa biblia contiene algunas profecías de los profetas sobre el reino. cuando beltsasar, el emperador de babilonia, tuvo un sueño que lo asustó, ni los adivinos ni los psíquicos pudieron interpretarlo, pero el profeta daniel lo interpretó. dijo: “‘llévame ante la presencia del rey y yo le expondré la interpretación.’ arioc llevó rápidamente a daniel ante la presencia del rey, y le dijo: ‘he hallado entre los deportados de judá a un hombre que hará conocer al rey la interpretación.’ el rey llamado beltsasar tomó la palabra y dijo a daniel: ‘¿eres tú capaz de darme a conocer el sueño que tuve y su interpretación?’ daniel respondió ante el rey, diciendo: ‘el rey interroga sobre un misterio que no se lo puede aclarar ningún sabio, adivino, mago o astrólogo. sin embargo, hay en el cielo un dios que revela los misterios, y que ha dado a conocer al rey nabucodonosor lo que sucederá en los días venideros.
tu sueño y las visiones de tu imaginación, cuando estabas en tu lecho, fueron estos: a ti, rey, mientras estabas en tu lecho, te sobrevinieron pensamientos acerca de lo que va a suceder en adelante, y el que revela los misterios te ha hecho conocer lo que va a suceder. en cuanto a mí, este misterio me ha sido revelado no porque yo tenga una sabiduría superior a la de todos los vivientes, sino para que se ponga de manifiesto al rey la interpretación, y así conozcas los pensamientos de tu corazón. tú, rey, estabas mirando, y viste una gran estatua. esa estatua, enorme y de un brillo extraordinario, se alzaba delante de ti, y su aspecto era impresionante. su cabeza era de oro fino; su pecho y sus brazos, de plata; su vientre y sus caderas, de bronce; sus piernas, de hierro, y sus pies, parte de hierro y parte de arcilla. tú estabas mirando, y de pronto se desprendió una piedra, sin que interviniera ninguna mano: ella golpeó la estatua sobre sus pies de hierro y de arcilla, y los pulverizó. entonces fueron pulverizados al mismo tiempo el hierro, la arcilla, el bronce, la plata y el oro; fueron como la paja en la era durante el verano: el viento se los llevó y no quedó ningún rastro.
en cuanto a la piedra que había golpeado la estatua, se convirtió en una gran montaña, y llenó toda la tierra. este fue el sueño; ahora diremos su interpretación en presencia del rey. tú, rey, eres el rey de reyes, a quien el dios del cielo ha conferido la realeza, el poder, la fuerza y la gloria; él ha puesto en tus manos a los hombres, los animales del campo y las aves del cielo, cualquiera sea el lugar donde habitan, y te ha hecho dominar sobre todos ellos: por eso la cabeza de oro eres tú. después de ti surgirá otro reino inferior a ti, y luego aparecerá un tercer reino, que será de bronce y dominará sobre toda la tierra. y un cuarto reino será duro como el hierro: así como el hierro tritura y pulveriza todo – como el hierro que destroza – él los triturará y destrozará a todos ellos. también has visto los pies y los dedos, en parte de arcilla de alfarero y en parte del hierro, porque ese será un reino dividido: habrá en él algo de la solidez del hierro, conforme a lo que has visto del hierro mezclado con la masa de arcilla; pero como los dedos de los pies son en parte de hierro y en parte de arcilla, una parte del reino será fuerte, y una parte frágil. tú has visto el hierro mezclado con la masa de arcilla, porque ellos se mezclarán entre sí por lazos matrimoniales, pero no llegarán a adherirse mutuamente, como el hierro no se mezcla con la arcilla. y en los días de estos reyes, el dios del cielo suscitará un reino que nunca será destruido y cuya realeza no pasará a otro pueblo: él pulverizará y aniquilará a todos esos reinos, y él mismo subsistirá para siempre, porque tú has visto, que una piedra se desprendía de la montaña, sin la intervención de ninguna mano, y ella pulverizó el hierro, el bronce, la arcilla, la plata y el oro. el dios grande hace conocer al rey lo que va a suceder en adelante. el sueño es cierto y su interpretación digna de fe.” daniel 2: 21 – 45.
el sueño fue acerca de los estados que se generarían. el primero es el reino de babilonia, gobernado por beltsasar, quien estaba simbolizado por la cabeza de oro.
seguido por el reino de persia, que fue establecido por kosro y luego gobernado por el rey ciro, quien recibió la autoridad sobre babilonia en el año 593 a.c., y fue simbolizado por el pecho y los dos brazos de plata.
luego fue seguido por el reino de macedonia, que destruyó al reino persa, y fue establecido por el macedonio alejandro en el año 336 a.c., fue simbolizado por el abdomen y los muslos de cobre.
luego, finalmente, fue seguido por el imperio romano, que fue establecido por el emperador bovbios en el año 63 a.c.. éste fue simbolizado por dos piernas de acero, y dos pies, uno de los cuales era de arcilla y el otro de acero; podrían ser los estados persa y romano, se afirma que era lo que significaba, o la división del imperio romano. (1)
“y en los días de estos reyes, el dios del cielo suscitará un reino que nunca será destruido…” la piedra que fue rechazada por los constructores ha llegado para destruir a los romanos y a los persas, y ha construido el reino durante siglos, y esa fuerza no se detendrá hasta el presente siglo.
esta profecía podría profetizar que esa debilidad es sólo temporal y el sol de una era islámica resucitará.
de manera similar al sueño de beltsasar, es el sueño de daniel de las cuatro bestias:
“y cuatro animales enormes, diferentes entre sí, emergieron del mar. el primero era como un león y tenía alas de águila. yo estuve mirando hasta que fueron arrancadas sus alas; él fue levantado de la tierra y puesto de pie sobre dos patas como un hombre, y le fue dado un corazón de hombre. luego vi otro animal, el segundo, semejante a un oso; él estaba medio erguido y tenía tres costillas en su boca, entre sus dientes. y le hablaban así: ‘¡levántate, devora carne en abundancia!’ después de esto, yo estaba mirando y vi otro animal como un leopardo; tenía cuatro alas de pájaro sobre el dorso y también cuatro cabezas, y le fue dado el dominio. después de esto, yo estaba mirando en las visiones nocturnas y vi un cuarto animal, terrible, espantoso y extremadamente fuerte; tenía enormes dientes de hierro, comía, trituraba y el resto lo pisoteaba con las patas. era diferente de todos los animales que lo habían precedido, y tenía diez cuernos. yo observaba los cuernos, y vi otro cuerno, pequeño, que se elevaba entre ellos. tres de los cuernos anteriores fueron arrancados delante de él, y sobre este cuerno había unos ojos como de hombre y una boca que hablaba con insolencia. yo estuve mirando hasta que fueron colocados unos tronos y un anciano se sentó. su vestidura era blanca como la nieve y los cabellos de su cabeza como la lana pura; su trono, llamas de fuego, con ruedas de fuego ardiente. un río de fuego brotaba y corría delante de él. miles de millares lo servían, y centenares de miles estaban de pie en su presencia.
el tribunal se sentó y fueron abiertos unos libros. yo miraba a causa se las insolencias que decía el cuerno: estuve mirando hasta que el animal fue muerto, y su cuerpo destrozado y entregado al ardor del fuego. también a los otros animales les fue retirado el dominio, pero se les permitió seguir viviendo por un momento y un tiempo. yo estaba mirando, en las visiones nocturnas, y vi que venía sobre las nubes del cielo como un hijo de hombre; él avanzó hacia el anciano y lo hicieron acercar hasta él. y le fue dado el dominio, la gloria y el reino, y lo sirvieron todos los pueblos, naciones y lenguas. su dominio es un dominio eterno que no pasará, y su reino no será destruido. interpretación de la visión. yo, daniel, quedé profundamente turbado en mi espíritu, y las visiones de mi imaginación me llenaron de espanto. me acerqué a uno de los que estaban de pie y le pregunté la verdad acerca de todo aquello. él me habló y me hizo conocer la interpretación de las cosas. ‘esos cuatro animales enormes son cuatro reyes que se alzarán de la tierra; y los santos del altísimo recibirán la realeza, y la poseerán para siempre, por los siglos de los siglos’.” daniel 7: 3 – 18.
los cristianos están de acuerdo en que los cuatro reinos eran babilonia, persia, grecia y el imperio romano. ellos creen que el reino fue establecido sobre la aparición de la religión de jesús y el establecimiento de la iglesia, cuando el espíritu santo descendió sobre los discípulos cuando estaban reunidos en jerusalén.
sin embargo, el reino espiritual que fue establecido por los apóstoles no puede haber sido el reino prometido. daniel habló sobre cuatro reinos reales, y el último fue aplastado por un verdadero rey, no uno espiritual. “y en los días de estos reyes, el dios del cielo suscitará un reino que nunca será destruido y cuya realeza no pasará a otro pueblo: él pulverizará y aniquilará a todos esos reinos, y él mismo subsistirá para siempre...” daniel 2: 44.
además, dijo sobre el reino y su profeta: “y le fue dado el dominio, la gloria y el reino, y lo sirvieron todos los pueblos, naciones y lenguas. su dominio es un dominio eterno que no pasará, y su reino no será destruido.” daniel 7: 14.
los discípulos entendieron de jesús (la paz sea con él) que el próximo reino sería real y no espiritual. pensando que sus manos lo establecerían, le preguntaron, luego de la crucifixión: “los que estaban reunidos le preguntaron: ‘señor, ¿es ahora cuando vas a restaurar el reino de israel?’” hechos 1: 6. jesús (la paz sea con él) se esforzó por explicarles que el reino era espiritual, mientras que el próximo reino sería un reino verdadero.
además, el reino de los discípulos no derrotó al estado romano; en vez de esto, los romanos derrotaron al cristianismo algunas veces, por ejemplo cuando ellos impusieron su paganismo en él.
sorprendentemente, ¿cómo pueden decir los cristianos que ellos derrotaron a los romanos, cuando afirman que jesús (la paz sea con él) murió en una cruz romana?
los musulmanes son la nación que aplastó a los romanos, los envió fuera de la tierra de palestina, siria y egipto, y luego tomó constantinopla, la capital del estado romano, como capital del islam, la religión del reino.
referencia:
1 – véase en: “revelando la verdad” de rahmatu allah al hindi (4 / 1166 – 1169); “la noticia del profeta del islam en el torá y en la biblia” por ahmad hejaze al saqa (2 / 48 – 51).