los escritores de la biblia se basaron en las profecías del torá, e intencional y obviamente alteraron muchos de los significados del texto del torá para adaptarlo a jesús (la paz sea con él). su amor por jesús (la paz sea con él), o sus hábitos de alterar, resultaron en la generación de un desentendimiento entre ellos acerca de muchas profecías que mencionaban al “esperado mesías”.
un ejemplo de esto es lo que encontramos en el libro de salmos acerca del “esperado profeta”. un salmo de david: “dijo el señor a mi señor: ‘siéntate a mi derecha, mientras yo pongo a tus enemigos como estrado de tus pies’.” salmos 110: 1. esta profecía en particular no indica de ningún modo a jesús (la paz sea con él) el hijo de maría.
pedro, o quienquiera que le haya relatado a pedro, estaba equivocado cuando lo interpretó: “también es cierto que david no subió al cielo; pero dice en un salmo: ‘dijo el señor a mi señor: siéntate a mi derecha hasta que ponga a tus enemigos debajo de tus pies.’ sepa entonces con seguridad toda la gente de israel, que dios ha hecho señor y cristo a este jesús a quien ustedes crucificaron.” hechos 2: 34 – 36.
la prueba de que pedro, y los cristianos después de él, estaban equivocados, es que jesús (la paz sea con él) dijo que él no era el “esperado mesías” mencionado por david. “mientras estaban allí reunidos los fariseos, jesús les preguntó: ‘¿qué piensan de cristo? ¿de quién debe ser hijo?’ contestaron: ‘será hijo de david.’ jesús agregó esta otra pregunta: ‘¿cómo entonces david, inspirado por dios, llama al cristo su señor? pues dice en un salmo: el señor ha dicho a mi señor: siéntate a mi derecha hasta que ponga a tus enemigos bajo tus pies. si david lo llama señor, ¿cómo entonces es hijo suyo?’ pero nadie pudo contestarle ni una palabra. desde aquel día, no hubo quien se atreviera a hacerle más preguntas.” mateo 22: 41 – 46. la respuesta que jesús (la paz sea con él) dio, fue consistente, indicando que el esperado profeta no era un descendiente de david, porque david lo llamó “señor”, y un padre no llama así a un hijo.
jesús (la paz sea con él) le preguntó a los judíos acerca del “esperado mesías”, el anunciado por david y por otros profetas: “¿qué piensan de cristo? ¿de quién debe ser hijo?” los judíos le contestaron: “él es el hijo de david.” jesús (la paz sea con él) les dijo que estaban equivocados, y dijo: “si david lo llama señor, ¿cómo puede ser su hijo?” entonces, el mesías no es un descendiente de david, ya que david lo llamó “mi señor”.
en el libro de marcos, jesús (la paz sea con él) dijo, “el mismo david, movido por el espíritu santo, lo llama ‘su señor’. ¿cómo entonces puede ser hijo suyo?” marcos 12: 37. además es mencionado en lucas: “entonces él les dijo: ‘¿cómo se puede decir que el cristo será hijo de david? en efecto, el mismo david dice en el libro de los salmos: el señor dijo a mi señor: siéntate a mi derecha hasta que ponga a tus enemigos como tarima de tus pies. david lo llama señor, ¿cómo entonces puede ser hijo suyo?’” lucas 20: 41 – 44. a pesar de estas declaraciones, los cristianos siguen insistiendo en que jesús (la paz sea con él) es el profeta a quien david había anunciado en su profecía, aún cuando dicen que jesús (la paz sea con él) es hijo de david.
en su epístola a los hebreos acerca de las buenas noticias de dios a david, que dios bendeciría a su hijo salomón, pablo, o el autor desconocido, hace una profecía acerca de jesús (la paz sea con él); él dice: “en efecto, ¿a qué ángel jamás le dijo dios: ‘tú eres mi hijo; en este día yo te he dado la vida?’ ¿de qué ángel dijo dios: ‘yo seré para él padre y él será para mí el hijo?’” hebreos 1: 5.
el escritor de esta carta cita la frase del libro segundo de samuel (7 / 14); él hace una profecía acerca de jesús (la paz sea con él). dice: “será un padre para él, y él será un hijo para mí.” el escritor pensó que la frase era acerca de jesús (la paz sea con él), así que lo escribió en la epístola. esta cita no es correcta. el contexto de la oración fue para david, ya que dios le ordenó al profeta natán decirle: “ahora, pues, dirás así a mi siervo david: ‘así ha dicho dios de los ejércitos: yo te tomé del redil, de detrás de las ovejas, para que fueses príncipe sobre mi pueblo, sobre israel; y he estado contigo en todo cuanto has andado, y delante de ti he destruido a todos tus enemigos, y te he dado nombre grande, como el nombre de los grandes que hay en la tierra. además, yo fijaré lugar a mi pueblo israel y lo plantaré, para que habite en su lugar y nunca más sea removido, ni los malhechores seguirán oprimiéndolo, como hacían antes; desde el día en que establecí jueces sobre mi pueblo israel; y a ti te daré descanso de todos tus enemigos. asimismo dios te hace saber que él te hará una casa. y cuando tus días sean cumplidos, y vayas a descansar con tus padres, yo elevaré después de ti a uno de tu linaje, el cual procederá de tus entrañas y afirmaré su reino. él edificará una casa para mi nombre, y yo afianzaré para siempre su trono real. seré un padre para él, y él será para mí un hijo. si comete una falta, lo corregiré con varas y golpes, como lo hacen los hombres; pero mi misericordia no se apartará de él como la aparté de saúl, al que aparté de tu presencia. tu casa y tu reino durarán eternamente delante de mí, y tu trono será estable para siempre.’ natán comunicó a david toda esta visión y todas estas palabras.” samuel 2do 7: 8 – 17.
la persona de la profecía es un hijo de david, y no uno de sus nietos. él sería el rey de los hijos de israel luego de la muerte de david. él construiría la casa de dios, y fue advertido del castigo de dios si su camino se alejaba del camino de dios; todo lo mencionado se adapta a la persona de salomón, como fue mencionado en el torá.
sin embargo, ninguna de las profecías mencionadas se adapta a jesús (la paz sea con él), porque, según los cristianos, jesús (la paz sea con él) es dios, y no podría haber sido advertido por dios. él era perfecto, y no tuvo pecados. jesús (la paz sea con él) no construyó casa alguna de dios en la tierra, y nunca fue un rey de los hijos de israel. él no tuvo reino en este mundo, como dijo: “jesús contestó: ‘mi realeza no procede de este mundo; si fuera rey como los de este mundo, mi guardia habría luchado para que no cayera en manos de los judíos. pero mi reinado no es de acá.’” juan 18: 36.
en el primer libro de las crónicas, se lee que el nombre del profeta es salomón. david recibió estas palabras: “te nacerá un hijo, que será hombre de paz; yo lo haré vivir en paz con todos los enemigos de su alrededor, porque su nombre será salomón, y mientras él viva, concederé paz y tranquilidad a israel.” crónicas 1ero, 22: 9.
otro ejemplo de estas invenciones o malentendidos, es lo que mateo dijo sobre jesús (la paz sea con él) y su retorno de egipto cuando era un niño. “josé se levantó, tomó de noche al niño y a su madre y se retiró a egipto. permaneció allí hasta la muerte de herodes. de este modo se cumplió lo que había dicho el señor por boca del profeta: ‘yo llamé de egipto a mi hijo.’” mateo 2: 14 – 15. él aduce que esto confirma la profecía del torá, que se encuentra en el libro de oseas 11: 1 – 2.
el mencionado verso en el libro de oseas no tiene nada que ver con jesús (la paz sea con él). más bien relata acerca del retorno de la nación de israel desde egipto con moisés. originalmente, el contexto es acerca de jacob, y sigue hablando sobre sus hijos y su retorno de egipto, su adoración a ídolos, y la desobediencia a los mandamientos y órdenes de dios. dijo: “cuando israel era niño, yo lo amé, y de egipto llamé a mi hijo. pero cuando más los llamaba, más se alejaban de mí; ofrecían sacrificios a los baales y quemaban incienso a los ídolos.” oseas 11: 1 – 2.
este verso no tiene relación con jesús (la paz sea con él); la adoración de los ídolos tuvo lugar antes de jesús (la paz sea con él), y no puede ser aplicada a las personas contemporáneas con él. los judíos habían dejado de adorar ídolos cientos de años antes de que jesús (la paz sea con él) naciera, después de que se liberaron de la esclavitud de babilonia, y nunca se retiraron de ese arrepentimiento, como nos cuentan los libros históricos.
el empleo de la forma “mi hijo” es comúnmente usado en el torá, como en: “y dijo el señor a moisés: cuando vuelvas a egipto, harás delante de faraón todos los prodigios que yo he puesto en tu mano; yo, por mi parte, endureceré su corazón, y no dejará salir al pueblo. y dirás a faraón: así dice el señor: israel es mi hijo, mi primogénito. yo te he dicho: ‘deja ir a mi hijo para que me dé culto’…” éxodo 4: 21 – 23.
jesús (la paz sea con él) sufrió por los malentendidos de sus palabras por parte de los discípulos, y durante su vida él corrigió muchos de los errores en cuanto al entendimiento de las profecías, y aún muchos de sus dichos. ellos fallaron al entender el más simple de sus dichos. si ese fue el caso, ¿cómo pudieron haber entendido las profecías?
en determinada circunstancia los aconsejó diciendo: “¿porqué están hablando de que no tienen pan? ¿todavía no entienden ni se dan cuenta? ¿tienen la mente cerrada? ¿teniendo ojos no ven, y teniendo oídos no oyen? ¿no recuerdan…?” marcos 8: 15 – 18.
en otro momento, jesús (la paz sea con él) habla con ellos y ellos no lo entienden, “cuando oyeron todo esto, muchos de los que habían seguido a jesús dijeron: ‘¡este lenguaje es muy duro! ¿quién puede sufrirlo?” juan 6: 60.
ellos solían malinterpretar sus palabras simples, y luego estaban temerosos de pedirle que les explicara lo que no habían entendido. marcos dijo: “…porque iba enseñando a sus discípulos. y les decía: ‘el hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres, que le darán muerte; y, a los tres días de muerto, resucitará.’ pero ellos no entendían lo que les decía y tenían miedo de preguntarle.” marcos 9: 31 – 32.
estos malos entendidos de las escrituras se extendieron aún a las personas educadas y a los individuos de elite de los hijos de israel. nicodemo malentendió las palabras de jesús (la paz sea con él) cuando dijo: “jesús le contestó: ‘en verdad te digo, nadie puede ver el reino de dios si no nace de nuevo, de arriba.’ nicodemo le dijo: ‘¿cómo renacerá el hombre ya viejo? ¿quién volverá al seno de su madre para nacer de nuevo?’ jesús le contestó: ‘en verdad te digo: el que no renace del agua y del espíritu no puede entrar en el reino de dios. lo que nace de la carne de carne es, y lo que nace del espíritu es espíritu. por eso no te extrañes de que te haya dicho: necesitan nacer de nuevo, de arriba...’ nicodemo volvió a preguntarle: ‘¿cómo puede ser esto?’ respondió jesús: ‘tú eres maestro en israel, ¿y no entiendes esto?’” juan 3: 3 – 10. nicodemo no entendió el significado espiritual del re nacimiento; ¡él pensó que nacer de nuevo implicaba que la persona volviera al vientre materno!
nicodemo fue el maestro de los hijos de israel. si ésa fue la manera en que él entendió… ¿qué pasa con mateo, un recaudador de impuestos, y con juan y pedro, los pescadores? ellos eran dos discípulos iletrados, según el libro de los hechos. “quedaron admirados al ver la seguridad con que hablaban pedro y juan, que eran hombres sin instrucción y desconocidos…” hechos 4: 13.
los discípulos de jesús (la paz sea con él) eran los iletrados del mundo, como pablo relató; él dijo: “pero dios ha elegido lo que el mundo tiene por necio, con el fin de avergonzar a los sabios; y ha escogido lo que el mundo tiene por débil, para avergonzar a los fuertes.” corintios 1ero 1: 27.
la relación entre las palabras y actos de jesús (la paz sea con él) (durante su vida en la tierra) y las profecías de las escrituras no fueron claras para los discípulos. luego, después de su ascenso, pensaron que las profecías eran para él (la paz sea con él). “jesús encontró un burrito y lo montó. así se cumplió la escritura: ‘no tengas temor, ciudad de sión, mira que viene tu rey montado en un burrito.’ los discípulos no se dieron cuenta de esto al momento. pero, cuando jesús fue glorificado, comprendieron que dicha escritura se refería a él, y que anunciaba precisamente lo que habían hecho por él.” juan 12: 14 – 16.
los hijos de israel habían estado esperando el salvador. ellos asumieron que era jesús (la paz sea con él): “…‘¿realmente este hombre es el profeta?’ otros afirmaban también: ‘es el cristo.’ pero unos se preguntaban: ‘el cristo, ¿puede venir de galilea? ¿no dicen los profetas que el cristo nacerá de la descendencia de david, y que saldrá de belén, la ciudad de david?’” juan 7: 40 – 42.
la gente, a pesar de su diferente cultura, estaban tratando de encontrar salvación a través de jesús (la paz sea con él). “y tú, belén efratá, tan pequeña entre los clanes de judá, de ti me nacerá el que debe gobernar a israel: sus orígenes se remontan al pasado, a un tiempo inmemorial. por eso, el señor los abandonará hasta el momento en que dé a luz la que debe ser madre; entonces el resto de sus hermanos volverá junto a los hijos de israel. él se mantendrá de pie y los apacentará con la fuerza del señor, con la majestad del nombre del señor, su dios. ellos habitarán tranquilos, porque él será grande hasta los confines de la tierra. ¡y él mismo será la paz! si asiria invade nuestro país y pisa nuestros palacios, le opondremos siete pastores y ocho príncipes del pueblo: ellos apacentarán a asiria con la espada y al país de nemrod con el acero. y él nos librará de asiria, si llega a invadir nuestro país y pisa nuestra frontera.” miqueas 5: 1 – 5.
de hecho, jesús (la paz sea con él) no completó esta profecía. los judíos estaban buscando por quien fuera su rey, los salvara de los asirios, y restituyera la paz entre ellos.
el dr. ahmad shalaby cita las palabras de parry acerca de jesús (la paz sea con él): “por su elocuencia el fue capaz de atraer a muchos de sus seguidores (los judíos que esperaban al mesías), y ellos le otorgaron ese título.”
ellos le atribuyen lo que él no dijo, como veremos más adelante.