Primer Jutba:
Sheij Muhammad ibn Salih Al-Uzaimin
Alabado sea Al-lah, Quien facilitó para Sus siervos los ritos de adoración y les da su recompensa desde Su generosidad ilimitada, y los agració con festejos que les traen el bien y los bendicen repetidas veces. Hizo también seguidos los tiempos de los ritos para que la gente gane dinamismo en la adoración, porque ni bien termina el mes de Ramadán ya empieza el tiempo del Hayy a la Casa Santa.
Lo alabamos por Sus gracias que no tienen límite ni cuenta, y Le agradecemos por Sus dones y generosidad, y es Su derecho que se le agradezca.
Doy testimonio que nada ni nadie merece ser adorado sino Al-lah, el único Creador y Sostenedor, y todo tiene un tiempo determinado ante Él; y doy testimonio que Muhammad es Su siervo y Mensajero y la mejor persona en adorar a Al-lah, en rezar, dar limosna y peregrinar. La paz y bendiciones de Al-lah sean con él, con su casa pura y con sus sahaba, que Al-lah esté complacido con todos ellos, que nos precedieron hacia el bien; y a los que les siguieron, siguen y seguirán en la fe mientras dure la vida en esta tierra.
Al-lahu Akbar, Al-lahu Akbar, no hay nada ni nadie que merezca ser adorado sino Al-lah, Al-lahu Akbar, Al-lahu Akbar, alabado sea Al-lah. Al-lah está por encima de todos y todo. Alabado sea Al-lah abundantemente mañana y tarde. Al-lahu Akbar mientras haya quien mantenga Su mención; Al-lahu Akbar mientras alguien sea sincero en su intención y sus actos; Al-lahu Akbar mientras se mantengan los ritos religiosos; Al-lahu Akbar mientras sean victoriosas las banderas de los creyentes; Al-lahu Akbar cada vez que ayuna y desayuna un ayunante y Al-lah Akbar cada vez que llega un día de ‘Id, y cada vez que alumbre un relámpago y truenen las nubes y den lluvia.
¡Hermanos! Teman a Al-lah y reconozcan Sus gracias sobre ustedes en este ‘Id bendito, que es el día con el que Al-lah coronó el mes del ayuno y dio comienzo a los meses del peregrinaje a la Casa Sagrada, y prometió a los ayunantes y orantes grandes y generosas recompensas. Este ‘Id en el que los corazones se llenan de alegría y gozo, en el que la tierra se engalana de luz y frescura, es el día en que los musulmanes salen a sus rezos alabando y glorificando a su Señor. En este ‘Id Al-lah nos agració con poder completar el ayuno y el rezo nocturno con la esperanza de ganar Su recompensa, que pase por alto nuestras faltas y nos permita presenciar su regreso en mejor estado, con fe y unidad sobre la verdad y contra la falsedad.
Nuestro ‘Id, hermanos y hermanas, no es un festejo de heréticos ni de politeístas. Los festejos prescritos en el Islam son 3: el festejo semanal del día viernes, y los conocidos ‘Id ul Fiter y ‘Id ul Adha, y no hay otros festejos similares, ni el cumpleaños de nadie ni las victorias en guerras y batallas, ni las coronaciones ni transmisiones de mando. Los sahaba, que Al-lah esté complacido con ellos todos, del Mensajero de Al-lah, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, nunca le festejaron cumpleaños siendo quienes más lo querían. Las impresionantes victorias musulmanas de Bader, Al Yarmuk y Al Qadisía tampoco se festejaron con un ‘Id. Tampoco se celebraron festejos por el califato de Abu Baker, de Omar, de Uzmán, de ‘Ali ni de otros musulmanes destacados, a ninguno se le celebraban cumpleaños. Si los cumpleaños fuesen beneficios para alguien se habrían apresurado a respetarlos. Los sahaba, que Al-lah esté complacido con todos ellos, que se preocuparon por la ciencia y la fe los hubiesen celebrado, al igual que los líderes de los musulmanes.
Ramadán se inicia cuando se ha confirmado de forma oficial la aparición de la luna nueva. Los errores que puedan tener en una región en cuanto a su avistamiento de la luna nueva de Ramadán y las diferencias que haya a este respecto son toleradas por Al-lah, Glorificado sea. La luna nueva tiene distintos avistamientos en distintos días, pues su punto de salida varía según el tiempo y el lugar, por lo que son aceptables los distintos avistamientos de la misma; es lo mismo que sucede con los rezos, pues sus horarios varían según la época del año y la ubicación geográfica de la tierra donde estamos. El festejo del ‘Id se confirma para quienes por su posición geográfica hayan podido avistar la luna nueva de Shawwal, y no se confirma para quienes no hayan podido avistarla.
Al-lah Akbar, Al-lah Akbar, la ilaha il-la Al-lah , Al-lah Akbar, Al-lah Akbar wa’ lil-lahil hamd.
Agradézcanle a Al-lah, hermanos y hermanas, por haberlos agraciado con esta religión recta y este sendero, el sendero de Al-lah, que es Dueño de los cielos y la tierra. Es el sendero de los veraces, los Profetas y los mártires; es la religión del Islam que Al-lah perfeccionó para Sus siervos, que fue de Su complacencia para ellos en este mundo y con él completó Su gracia sobre ellos. Es la fe de la buena guía, de la verdad y de la rectitud; prescribe la adoración exclusiva de Al-lah y prescribe la honestidad, el buen consejo, la justicia, y el buen trato, a la vez que prohíbe la mentira, el engaño, la falsedad y la injusticia. Prescribe todo comportamiento noble y virtuoso y prohíbe todo comportamiento bajo y viciado.
Si una persona sensata lo analiza, comprenderá su valor, y que si se reúnen todos los eruditos y mentes brillantes del mundo y reunieran sus conocimientos y aportes para crear una doctrina de vida paralela y alterna al Islam, no podrían y quedarían humillados, pues no hay gobierno más sabio que el de Al-lah, ni leyes ni un sistema más apropiado para la adoración que el que Al-lah ha dispuesto para Sus siervos. Así que aférrense a Él, que así estarán bien guiados; y sigan Su vía, que así estarán bien encaminados. Adoren a Al-lah con el Islam, que alcanzarán la felicidad; y apóyenlo enfrentándose a quienes lo combaten. Al-lah, Alabado sea, dijo en el Noble Corán: “Cuando sea que os llegue de Mí una guía, quienes sigan Mi guía no se extraviarán ni serán desdichados.”
Musulmanes, hoy estamos con una necesidad urgente de cohesión y solidaridad, de unir nuestras intenciones y nuestras obras, de cooperar por la verdad. Debemos tratar nuestros problemas religiosos y sociales de forma sincera, buscando sinceramente el beneficio común y no procurando el beneficio personal ni la crítica al prójimo. La intención debe ser reformar la práctica de la religión y reformar la sociedad, con esta intención pura y el avance sensato hacia el objetivo deseado viene el éxito y la felicidad in sha Al-lah.
Al-lah, Glorificado sea, dijo: “Juro por el transcurso del tiempo. Que ciertamente los hombres están perdidos, salvo aquellos que creen, obran rectamente, se aconsejan mutuamente cumplir cabalmente [con los preceptos divinos] y ser pacientes y perseverantes.”
www.islamhouse.com